¿Dormidos, distraídos? A despertar el sentido (y el sentido de lo común)
- Néstor Gómez
- hace 34 minutos
- 3 Min. de lectura
Siento a la humanidad en duda, con desesperanza, en duelo. No solo hablo de crisis económicas o sociales. Más bien de un agotamiento humano profundo, silencioso. En los equipos de trabajo, en las familias, en la sociedades hay señales claras: desorden, división, desconexión de un propósito. Y frente al espejo y en los espacios íntimos converso con personas dolidas, desorientadas, desmotivadas. Individuos con talento, pero sin rumbo. Con ganas de servir, pero sin impulso. Como si estuviéramos atrapados en un estado de distracción crónica. Dormidos, literalmente.
Como tú, mi decisión es ir más allá de la queja y seguir provocando la transformación de los sistemas desde adentro de cada persona, declarando con acciones y canciones que no estamos condenados. Hoy, una vez más, nos encontramos en la misión de ser despertadores del sentido que cada persona elige y con el que se conecta con otros para servir y para cuidar de todo.
Depende de Mí ya no es (sólo) un taller espectacular
Por eso Depende de Mí sigue siendo vigente. ¿El taller? Bueno, sí, y además, que sea esta la ocasión para contarte como hemos logrado que Depende de Mí se convierta en una forma de vida personal y organizacional. Con la determinación que compartimos de llevar la inspiración al hábito diario y de integrar para siempre la cultura de la responsabilidad individual a los sistemas que garantizan la dignidad de todos, he desarrollado un sistema de consultorías permanentes y un esquema de formación de formadores, que quiero poner a tu servicio. De esta forma, el método (humildad, lenguaje, elección, compromiso y acción) se convierte en un marco cotidiano de conciencia, cultura y disciplina y los resultados se mantienen, incluso cuando el facilitador ya no está.
Despertar desde las experiencias
Ya dicho que amo los procesos, también quiero que conversemos sobre los detonantes. Así como el espejo, las canciones y el arte de la comedia, hoy el método Depende de Mí utiliza experiencias cuidadosamente diseñadas que incluyen danza, pintura y tejido. Y símbolos y rituales como el kit DMI1 para dejar dormir el celular y recuperar la calidad de las conversaciones. Sigo asombrado del poder del arte para conectar, del humor para desbloquear, y de los rituales para anclar las ideas en la acción.
Despertar el sentido de lo común
El verdadero cambio ocurre cuando las personas sienten que lo que hacen tiene sentido más allá de sí mismas. Más que ofertas o respuestas, quiero que compartamos inquietudes, aciertos o fracasos de tantos años de camino en esta dirección. Por ejemplo, lo que he descubierto desarrollando acciones que despiertan el “nosotros”. ¿Cómo seguir creando y fortaleciendo proyectos colaborativos y de transformación social que activen el sentido de familia, comunidad, humanidad?. Desde voluntariados hasta procesos internos de diversidad desde el cuidado, la legalidad y la sostenibilidad.
Y todo eso... ¿por qué?
Este texto, los correos, los mensajes en redes sociales y la invitación a la madrugada del día “D” son pretextos para recordarte mi disponibilidad para que sigamos dinamizando la productividad, las relaciones y la salud integral en tu organización, en las familias y en nuestro mundo.
Porque creo, y lo veo a diario, que el verdadero cambio no viene de una gran política externa. Viene de una elección sencilla, personal, poderosa: Despertar. Y recordar, una vez más, que Depende de Mí.
